A medida que crecía note que la reflexión fue dando giros inaúditos, si terminabamos con alguna típica oración pero decidimos todos los alumnos hacer una verdadera reflexión. Contábamos historias, leímos fragmentos de libros, incluso comentarios o sucesos surgidos en la semana, fragmentos de canciones. Algo así como las parábolas echas por nosotros, made in el pueblo (que según nosotros sudabamos la gota gorda).
Desde entonces tengo esa costumbre de reflexionar al día sobre algo, puede ser algo que veo, algo que leo, algo que escucho, algo que siento, siempre es algo que me lleva a reflexionar (no lo puedo evitar).
El tema de hoy (ni que estuviera en mis 10 minutos de reflexión) pero es que ya no aguanto mas. Señores y señoras (señoritas) ya me canse. Si leyeron bien, me canse de leer violencia, escuchar como increpan a o

A veces estos pensamientos que generan tanto odio son contagiosos. Por ejemplo Georgito insulta a Yayita, haciendo escuchar de las maldiciones y pensamientos de venganza a Cosme. Entonces Cosme se llena de odio y repugnancia de Georgito por lo escuchado, y así se va infestando el entorno... una cadena de nunca acabar.
STOP
He tratado de ser paciente, de tolerar esa violencia, teniendo en la mente el dicho “a palabras necias oídos sordos”. Pero cuando ya no aguanto tanta ofensa les respondo algo de forma educada, de forma diplomática y lo que recibo de respuesta es más violencia incluso hacia mi persona.
En que momento la humanidad acepto a la violencia (verbal sobre todo) como parte de nuestra vida?
Les pido de corazón que cuando sientan ese odio, ese rencor, esas ganas de maldecir piénsenlo dos veces. Yo también he sido contaminada, si claro que sí... pero de verdad que estoy tratando de ser más humana y menos un ser hormonal (animal) que todos llevamos dentro.
Aprovecho para decirles que no he tenido mucho tiempo, me disculpo por no pasar a leerlos con la frecuencia que quisiera, pero ya me pondré al día. Gracias por sus visitas, sus comentarios.